Para estas edades, los objetivos más destacables son: mejorar su capacidad aeróbica, motricidad, elongación, flexibilidad, tonificación muscular, incremento de la concentración, rapidez mental y memorización, ademas de inculcar valores morales universales como: respeto, disciplina, auto-control, y lealtad entre otros.
Mediante el sistema de enseñanza y avance en grado, los jóvenes se vuelven responsables frente a la práctica del Arte Marcial, y también en su actuar cotidiano. Las clases se realizan en un ambiente positivo y motivador, propiciando nuevas amistades y una vida sana.